El reporting se ha convertido en el caballo de batalla de muchas organizaciones. Sobre todo en las más grandes que, cada mes, se procesa y entrega a la alta dirección un volumen ingente de información. Pero lo peor no es esto. Para el experto en Función Financiera de KPMG Benigno Prieto, “estos informes muchas veces reflejan lo que ha pasado o lo que pasa, pero no avanzan lo que pasará. Y esta sí es una información de alto valor”. De aquí la importancia de desarrollar los KPI que proporcionan datos sobre lo que de verdad se quiere o se necesita medir.

Definir estos KPI es una tarea en la que se debe implicar la dirección al más alto nivel. Y habrá que cambiarlos siempre que haya variaciones en la estrategia de la compañía. En el vídeo, Prieto plantea cuestiones muy interesantes, pero una fundamental es que los KPI deben estar muy “orientadas al negocio y hay que establecerlos pensando en qué aportan sobre lo que va a ocurrir, no sobre lo que ha ocurrido”.