El Controller de gestión, como figura clave en la toma de decisiones de la empresa, asume un rol protagonista a la hora de fijar aquellas métricas que permitirán medir el cumplimiento de los objetivos estratégicos establecidos a medio y largo plazo en el negocio.

A la hora de elegir los indicadores prioritarios y más adecuados, el Controller de gestión deberá poner en valor sus conocimientos tanto del tipo de empresa y modelo de negocio como del propio sector económico y su evolución en el mercado global.

De igual manera, el profesional de control de gestión tendrá que asumir los retos a nivel general a los que se enfrentan todas las compañías en este escenario de incertidumbre económica. David Díez, director de Control de Gestión en Estrella Galicia, señala en el Controller Fórum Online organizado el pasado 6 de mayo por el Instituto de Controllers, algunos de estos desafíos, como son la digitalización, una mayor competitividad, mejorar su función como business partner de su empresa, y aumentar la agilidad en los procesos.

Gestión del dato para impulsar los indicadores clave. El modelo DIKW

Con la finalidad de analizar las métricas y estudiar sus resultados para comprobar si se cumplen los objetivos del negocio, es fundamental el uso eficiente de los miles de datos que se generan a lo largo del año.

El modelo DIKW, también conocido como pirámide del conocimiento es una de las guías más precisas que muestra la evolución que tiene que seguir el estudio del dato para poder extraer toda la información que contiene y convertirla en conocimiento que, finalmente, se podrá aplicar en la empresa.

Este modelo se basa en la siguiente secuencia:

  • En la base de la pirámide se encuentre el dato en bruto. En sí mismo, no es más que un hecho o una cifra concreta que, sin contexto, carece de significado. “Un dato por sí solo no dice nada”, afirma David Díez.
  • En el segundo escalón se halla la información. En este caso, hace referencia al conjunto de datos y comprender cómo se relacionan entre ellos o con otros tipos de informaciones. En definitiva, se trata de darles contexto, perspectiva y categoría.
  • El conocimiento es el tercer paso del modelo DIKW. En esta fase es cuando se analizan los comportamientos de los datos para poder predecir su evolución.
  • Finalmente, en la cúspide de la pirámide se encuentra la sabiduría. En esta fase es cuando el Controller es capaz de comprender el comportamiento de los datos y, en consecuencia, saber aplicarlos en beneficio de la empresa.

En esta infografía puedes ver el modelo DIKW:

Según David Díez, a la hora de gestionar los datos los profesionales de control de gestión deben poner el foco en las fases de informaciónconocimiento y sabiduría. “Debemos ser capaces de utilizar los datos para convertirlos en información, generar conocimiento con nuestra experiencia y ponernos a trabajar para mejorar los indicadores clave de la compañía”.