Hace unos años, cuando Global Chartered Controller Institute (GCCI) detectó la necesidad de apoyo que precisaba la figura del Controller para poder dar respuesta a las nuevas demandas que su responsabilidad en la empresa requería, comenzó a tomar forma la idea de establecer un conjunto de estándares y elementos claves dentro del control de gestión.

La entrada en el nuevo siglo y, sobre todo, la profunda transformación que la era digital está imponiendo a las organizaciones ha afectado a todo el organigrama, pero de forma especial al Controller. El cambio que se ha venido encima en tan poco tiempo requiere que el responsable de este puesto ejerza como un consultor interno, que sea proactivo, capaz de conjugar el rol de estratega-planificador con el de controlador. En su universo actual, y en este entorno disruptivo, es preciso dominar los cuadros de mando, los mapas estratégicos y los modelos creativos, porque han pasado a ser piezas angulares del control de gestión.

Referente en España, Portugal y América Latina

La respuesta no se hizo esperar, desde su inicio el instituto llega a acuerdos con centros de formación de prestigio que imparten formación para que la figura del Controller actúe con eficacia en cualquier organización. Hoy, la acreditación Chartered Controller Analyst – CCA Certificate® es el documento de referencia que se puede exhibir en el área del control de gestión para garantizar conocimientos y profesionalidad. Sin duda, es ya un referente para las empresas, organizaciones y empleadores a la hora de la contratación de un Controller.

El instituto también se está convirtiendo en un centro de referencia en investigación e innovación, mediante la publicación de estudios en colaboración con KPMG, Microsoft o SAGE y con el lanzamiento de la Cátedra de Control de Gestión junto con la Universidad Politécnica de Cartagena.

Habilidades emocionales
Al aprendizaje y profundización en los aspectos técnicos que requiere hoy el desempeño de esta profesión por el cambio casi permanente en el que se ha instalado la actividad económica, se une la instrucción en un aspecto crucial y al que hasta hora no se le ha prestado apenas atención: las habilidades personales. Este factor es un de los que más alto puntúan en las encuestas de satisfacción los controller que ya están certificados. Y no es extraño, puesto que una gran parte de su jornada laboral se vuelca en la interacción con otros departamentos, en la comunicación de forma precisa y entendible de cuestiones relacionadas con la estrategia de la empresa…

Código ético
No obstante, también hay otras cuestiones que abundan en la notoriedad de este título. Todos los Controllers que obtienen este certificado tras haber superado los tres niveles de estudio programados, antes de poder utilizarlo de forma pública, deben firmar un código ético que establece los estándares de conducta personal y profesional que han de cumplir. Además, cada tres años se comprometen a renovar la certificación. Esta medida no es baladí, puesto que los pasos de gigante que se dan en cortos espacios de tiempo por efecto de la innovación tecnológica, provoca que estos profesionales tengan que renovar con frecuencia sus conocimientos y actualizarlos.

Intercambio de experiencias
Como complemento a la formación, GCCI también ha desarrollado otras experiencias que permiten poner en valor el aprendizaje de sus certificados. Entre ellas, el principal foro de Controllers que se celebra hoy en España, el Congreso Controller Centricity, que es de carácter anual, encuentros en diferentes puntos de la geografía nacional y jornadas que permiten el intercambio de vivencias, desarrollos y visiones de trabajo entre los profesionales de esta área, que les son de utilidad real en su día a día.

De este modo lo expresa José Cabrera, director de control de gestión en el Grupo Vips. “A nosotros, obtener la certificación, nos ha servido para compartir experiencias con profesionales del sector y nos ha ayudado a ver best practices (mejores prácticas) en muchos temas relacionados con nuestra área. Incluso, nos ha permitido focalizar en un apartado que considero muy importante: todo lo relacionado con el mundo de las habilidades soft, de capacidades de impacto y de influencia, de capacidad de relación interpersonal entre los equipos. La verdad es que es un conjunto muy bueno. Nos ha reforzado como equipo y nos ha servido como punto de unión para compartir estándares de conocimiento”.

Para 2018, GCCI está preparando cuatro Controller Fórum en San José (Costa Rica), Buenos Aires (Argentina), Santiago (Chile) y Quito (Ecuador), junto con escuelas de negocio de referencia como el INCAE Business School o la Universidad Adolfo Ibáñez de Santiago de Chile, dos de las más prestigiosas de América Latina.

Centros acreditados
Y si desde el mundo de la empresa se aprecia de forma clara el programa formativo desarrollado por GCCI, en los campus universitarios y de las escuelas de negocio su éxito es cada día más apreciable. A día de hoy se imparten los programas de certificación en más de 30 centros de España, Portugal y del continente americano, centros de primer nivel como CUNEF (Colegio Universitario de Estudios Financieros), la Universidad de Valencia y la Universidad Loyola de Andalucía, entre otras.

Adolfo Millán, catedrático de la Universidad Complutense de Madrid, asegura que “el instituto está haciendo un trabajo muy interesante en una doble vía. Por una parte, emite un certificado que está garantizando la calidad del profesional y que tiene un excelente nivel de formación y de profesionalidad. Además, facilita el encuentro entre profesionales, que siempre se echaba en falta, para que puedan relacionarse e intercambiar experiencias, y crear una red de comunicación que permita la solución de los problemas inherentes a la profesión”.